Tuesday, December 11, 2007

Hoguera Sagrada

Flama viva de Nuestro Corazón

Crónica de la Cumbre Olmeca 2007
Texto completo.

Iniciando el camino que lleva a la Tierra Olmeca, a la región de los Tenocelome, observando las señales manifiestas en todo, prestando atención a la voz susurrante del Nagual que llevamos dentro, para descifrar el mensaje y acatarlo.

Durante el trayecto ya en tierra Veracruzana, las águilas, mensajeras de lo divino, siempre volaban delante de nosotros, realmente eran muchas, hasta grupos de mas de diez. Para mayor sorpresa una de ellas, de plumas ligeramente claras en las patas, descendió a la vera de la camino, con postura elegante y digna no se inmuto al pasar nuestro vehículo a unos cuantos metros de ella.

Al llegar a Coatzacoalcos nos recibe una lluvia fugaz, permitiendo el que un gran arco iris cuyo arco estaba completo, es decir a ambos lados del camino nos diera la bienvenida. El quedar en medio de un universo de colores y cruzarlo es una experiencia maravillosa, mientras el Padre Sol Tonatiuh, con su roja intensidad, se ocultaba tras de nosotros por el Rumbo Cihuatlampa.

El 16 de noviembre:

Haciendo un rezo antes de reunirnos con todos los participantes, pidiendo nuevamente la bendición de los Ancestros, acudimos a la cita, dispuestos a dar lo mejor de nosotros mismos.

Procedo a encender el sahumador esa noche del 16 de noviembre, habiéndose pronosticado huracán y estando Ehecatl soplando con fuerte intensidad, hermanas y hermanos de diferentes rumbos hicieron con sus cuerpos una unidad para contener el aire y así prender el carbón con el fuego del ocote, mientras entonaban cantos y se hablaba de manifestaciones divinas.



Con tanto amor encendió rapidisimo, el rojo vivo de la bracita manifestaba conteto y regocijo, el aroma del copal se esparció por doquier.



Nos integramos al circulo con todos los hermanos presentes.



Se inicia el participar del NOSOTROS, la Conformidad en armonía.

Llegamos a la desembocadura del Río Coatzacoalcos y la Mar, en donde nos esperaba una balsa. Presentamos la ofrenda de copalli a la Madre Chalchihuitlicue, solicitamos su licencia para proceder a navegar sobre sus aguas. Subimos a la balsa cinco personas, causalmente la referencia numérica del Quincunce, nos dirigimos al sitio en donde en determinadas circunstancias se observa una línea "rojo fuego" bajo el mar, que une Coatzacoalcos con Punta San Juan, en cuya dirección, más tierra adentro, se encuentra ubicado uno de los sitios más importantes para los Olmecas, el Volcán de San Martín Pajapan.

Al subir a la barca el viento estaba fuerte, el mar se mostraba agitado y con grandes olas, más al iniciar su avance mar adentro todo cambio súbitamente, "Los Vientos" se mostraron benévolos: la mar dejo su agitación, su movimiento pareciera el suave arrullo de una madre a un hijo recién nacido; el viento bajo su intensidad notablemente, pareciera que su contacto mas bien fuese una caricia; el cielo se abrió, retiro las oscuras nubes y permitió que las estrellas se mostrasen y que la piel del Jaguar nos cobijara y que la Abuela Luna, Metztli, en su fase creciente luciera esplendorosa.

Momento Sacro:

Junto a la hoguera a encender sobre la barca, saludamos a los Rumbos del Universo, cada Dirección fue acompañada de tres toques del atecocolli de Itzael y el Ehecatl de Andrés, de la bracita del Sahumador se encendió un ocote y este a su vez encendió el Fuego Ceremonial, la Divina Hoguera.




Nuestro corazón resonaba como un tambor, sintiendo como se encendía de profundo amor ante la presencia de lo Sagrado, de aquello que no tiene palabras con las cuales expresarse, mas que puede sentirse en lo profundo del ser.



Todo fluye sin contratiempo alguno, el fuego se mostró intenso y firme desde el principio, abrió el vortice espiralino del espacio-tiempo, que permite la manifestación de ciertas energías, en este caso las de las de Quetzalcoatl.



De la Hoguera Sagrada pase unas brazas encendidas al sahumador, para conservar y transportar ese divino Fuego desde el vientre del popochcomitl.



Acto seguido encendí la antorcha, la que estuvo presente en los Fuegos Olímpicos de 1968, la que indudablemente guarda una historia, y con esa conexión de un mismo Fuego nos dispusimos a encontrarnos con los hermanos caminantes, que en silencio, con solemne paso serpentino arribaron al lugar donde el fuego pasaría a tierra firme.



Subieron a acompañar La Hoguera Sagrada, instantes antes de bajar de la barca, como Testigos del hecho: Jesús Fabián Ortiz, Don Antonio Velasco Piña, Paty Ríos y Ana Luisa Solís-



Dos Guerreros, hermanos Chontales (Tabasco), que amorosamente transportaron en andas la Hoguera Sagrada.



Iniciaron intensas actividades, en donde el alma, el cuerpo, el corazón de todos los que participamos se entregaron de lleno.



A partir de esa noche el cambio de clima fue radical, el viento soplo suave, el amanecer estuvo pleno de luz, de sol y las noches mostraron la piel del Jaguar, a las estrellas en todo su esplendor.


Flama triple del corazón.

El Atlachinolli,
Fuego y Agua, los dos elementos generadores de vida, la Hoguera Sagrada se encendió sobre las Aguas Vivas de la Tierra Olmeca. La reconciliación de los opuestos, el Retorno de Quetzalcoatl se manifestó pleno de armonía.

Al día siguiente, 17 de noviembre:

Navegamos por el Río Coatzacoalcos, transportando el Fuego de la Hoguera en las bracitas del Sahumador.



Nos dirigimos a la Villa del Espíritu Santo, ahora llamada Barragantitlan, lugar del encuentro entre "dos mundos", en donde desde 1522 se asentaron junto a los Indígenas, los recién llegados Españoles.



Específicamente a este evento vinieron personas desde España: Mary, Susana, Tina y Carlos, de la Tribu de Manresa en Artés; María López Echeverría, de Madrid. Navegamos en la misma barca 13 personas, ocho Mexicanos y cinco Europeos, ahora llegamos juntos al lugar del encuentro, más ahora en armonía, en paz, en reconciliación.

El Río Coatzacoalcos le dio a Malinalticitl un regalo especial, ir acompañada de dos hijos: Christopher Ángel e Itzael.

Por cierto, la etimología de Coatzacoalcos es por demás elocuente: Proviene del náhuatl coatl, culebra; tzacualli, donde se guarda o se esconde algo; y co sufijo de lugar: "en el escondite de la culebra". El término Coatzacoalcos está ligado al tema de Quetzalcoatl.

El atecocolli anuncia la llegada del Fuego Sagrado a Barragantitlan, a lo que responden con su atecocolli un significativo grupo de Guerreros presentes en tierra firme.

El Fuego Sagrado fue recibido por un gran contingente, con canto, con música, muchos jóvenes y niños bellamente ataviados, con bellas sonrisas, con danza y principalmente con amor. Las Autoridades del sitio dieron la bienvenida, se encendió otro "Fuego" y nuevamente águilas surcaron los cielos del Espíritu Santo.


Realmente fue hermoso todo lo acontecido. Diversos hermanos y hermanas de América y de Europa, tomaron la palabra, siempre tendiente a resaltar los elementos coincidentes, todo aquello que nos une.

Grupos de jóvenes adolescentes bailaron su folclor, bella y dignamente representaron su gozo por el Fuego del Corazón de La Serpiente Emplumada.




En este espacio de la tierra, todo mundo esta involucrado con el tema de Quetzalcoatl, ancianos, adultos, jóvenes, niños. Ha sido muy grato, emotivo e ilustrativo.

Por la tarde llegamos a Minatitlan. Durante el trayecto dos grandes nubes con forma de Jaguar custodiaron el Fuego en todo su recorrido por el Rió Coatzacoalcos., mientras el hermoso Sol de Cihuatlampa se ocultaba, en la hora sublime que marca "la raja entre los mundos", sobre su elemento agua, en la casa del Jaguar.



Ya la Piel del Jaguar se mostraba, al llegar a Minatitlan con el Fuego Sagrado:




Al desembarcar, un grupo de 50 Jaraneros, entre ancianos, jóvenes y niños, hacia vaya tocando con singular entusiasmo su instrumento.





El Fuego pasa por en medio de esa vaya de armonía musical, de alegría de contento, procediendo a encender otro "Fuego", en este caso con la participación de la Alcaldesa del sitio.




En cada uno de estos sitios, el Abuelo Fuego se mostró generoso, su luz se irradio de inmediato, su calor nos unió y conmovió los corazones.

Tanto en Coatzacoalcos, como en Barragantitlán y en Minatitlan se hizo solemne entrega de Bastones de Mando. En todos los casos era visible la emoción, el respeto y el contento que nos embargaba a todos los presentes.

Fue una expresión común en todos aquellos con los cuales se tuvo contacto, de que lo realizado tenga continuidad, que las RAICES se sigan cultivando, que den Flor y Fruto, que el ciclo que ahora se ha abierto ya no se pierda.

Que toda América, que todo el planeta se una como un solo corazón.

Que Así Sea. Ometeotl.

El Tercer día, 18 de noviembre:

Emprendimos la caminata ritual a la Huehuetlapallan, éramos muchos en este recorrido hacia nuestros antiguos orígenes, solamente de la Palabra de la Virgen de Zapopan y del grupo de la Jefa Paty Ríos, llamados del Dulce Caminar, asistieron un promedio de cincuenta personas.



La columna camina varios kilómetros hasta llegar al lugar en donde ya nos aguardaban otros hermanos: La Conformidad de Acámbaro Capitaneada por Bucio y la Conformidad del Señor del Veneno, de México – Tenochtitlan, danzaban en éxtasis sobre uno de los montículos del sitio.



Finalmente todos nos integramos en una unidad de almas y corazones.







La Mesa del Señor del Veneno, al dar su Palabra, con sumo respeto menciona reconocimiento para ciertos Jefes no presentes, entre ellos al General Don Manuel Rodríguez González, de la Mesa de la Santa Cruz del Espíritu Santo, de Santiago de Querétaro. "ÉL ES DIOS".

Se enciende un nuevo Fuego de manera comunitaria, solicitándoles a Paty Ríos y Ana Luisa Solís que me acompañen a hacerlo en conjunto, aplicando el concepto del Nosotros, que define el ser femenino.
En dicho momento águilas volaban alrededor del montículo.

Durante el transcurrir del 18 de noviembre hubo purificación en el temazcal, todos muy concurridos, al mismo tiempo cinco se estaban llevando a cabo.

Llega la tarde y en el Altar del Montículo de la Huehuetlapallan se apagan los Fuegos, excepto el del Sahumador que portaba el Fuego de la Hoguera Ceremonial encendido sobre la Madre Chalchihuitlicue.


Llega el momento culminante de las 12 de la noche y el cruce en el cenit de Tianquiztli, Tzab, en otros sitios conocidas como Pléyades. Ya habíamos Saludado a los Rumbos y solicitado su licencia, por ende a partir del Fuego de la Hoguera Sagrada presente en el popochcomitl se encendió el Fuego Ceremonial de la Huehuetlapallan.



El acto llevado a cabo, de acuerdo a los Guardianes de la Tradición Olmeca, no se había llevado a cabo por una Cihuatl, por una Mujer, por lo menos en los últimos 500 años, dando ahora pauta un nuevo comienzo.
Abriendo el ciclo incluyente de lo Femenino, con su sentido de Amor, Elegancia, Sobriedad y Dignidad.



Tras el Saludo y el Silencio Solemne, percibiendo la Divina Presencia de Quetzalcoatl, en conexión plena con Tinaquiztli, Tzab, Pléyades en la Huehuetlapallan, se inicia el canto, In Xochitl In Cuicatl. Velando el Fuego Ceremonial hasta el amanecer y encendiendo los sahumadores de todas las ahí presentes con el fuego proveniente de la Divina Hoguera y de ahí los otros fuegos, mientras cantamos:

En esta noche serena
Que tiene piel de Jaguar,
Te canto a ti mi alabanza
Divina Madre Tonantzin.

Esta columna de humo
Que esta Hoguera desprende
Son oraciones que ascienden
Son peticiones al cielo.

Recibe Fuego la ofrenda
Del copal y la mirra
Es la ofrenda divina
A la bracita encendida

Animas conquistadoras
Sé que están aquí presentes
Transitan por el humito
Uniendo tierra con cielo.

Malinche de Sahumador
Cuida el Fuego Sagrado
Es la base de la unión
De todos los Mexicanos.
OMETEOTL

Las Visiones:
Durante esta ceremonia ingreso en "otra realidad", veo que por los Cuatro Vientos llegan multitud de niño, entre 5 y 9 años, todos sonrientes, contentos, mostraban alegría y confianza, me rodeaban y tomaban de las manos. Fue tan intensa esta luminosa visión, que llego un momento que creí que la realidad era la de estar con los niños y que lo otro era un sueño. Al estar en medio de dos percepciones y hacer un esfuerzo por ubicarme, pues gozaba estar con los niños, me dejo exhausta y tuve que sentarme un momento para reponer mi materia. Así fue y continuamos cantando.

Al pie del montículo mi dualidad, Andrés, "ve" que cientos de pequeños seres semejantes a abejas de color azul índigo, descienden del cielo y nos rodean.

El Fuego del Amor en el corazón de todos.

Cuarto día, 19 de noviembre:

Amanece y el Padre Sol se manifiesta con su tierna luz por el oriente. Nos disponemos a transportar el Fuego Sagrado ahora a San Lorenzo Tenochtitlan, nuevamente navegamos, ahora vamos en la balsa dos Cihuatl y dos Guerreros como custodios, uno de ellos llamado Tormenta, portando la Bandera de la Paz.

Pléyades tiene como raíz Plei, que significa navegar, las recibimos a ellas navegando en el cielo y nosotros sobre el agua continuamos navegando durante cinco horas, causalmente uniendo dos símbolos sagrados, el Fuego Ceremonial y el Fuego de la Oriflama, Bandera de la Paz.





La asignación de los Guerreros custodios fue al azar, vi que Tormenta al acudir al llamado portaba un lienzo enrollado, mas al estar ya navegando, grata fue mi sorpresa al ver que extiende la Bandera de la Paz y la hace revolear todo el trayecto. Definitivamente no hay casualidades.

En San Lorenzo Tenochtitlan todo el pueblo estaba de fiesta por la llegada del Fuego Ceremonial. Tocaban jarana, bailaban, cantaban, de múltiples maneras mostraban su entusiasmo.


Itzal: atecocolli y pantli de la paz.

Con ese contento iniciamos la caminata desde el embarcadero hasta el museo del sitio, lugar hermoso, poseedor de imponentes esculturas, herencia de los Ancestros Olmecas.



En el museo, Don Félix Ramírez, Guardián y miembro del Consejo Olmeca, de 85 años de edad, nos da la bienvenida. Su fortaleza en todos sentidos es evidente, claro en sus conceptos, artista, jaranero. Recibe su Bastón de Mando con gran regocijo y nos acompaña con paso vigoroso en la caminata de varios kilómetros hasta el sitio donde fueron encontradas varias de las monumentales cabezas Olmecas.



Ya en la zona la comunidad Saluda a Los Rumbos del Universo y se enciende la última hoguera de estos cuatro días rituales. Ahí convergimos todos, reunidos en torno a la enorme y simbólica Piedra Cúbica, cuya presencia es mas que elocuente. En el sitio tambien fue encontrada una gran esfera, la cual se encuentra en el museo de San Lorenzo Tenochtitlan, lo que entre otras cosas demuestra el conocimiento de la geometría sagrada por la cultura Olmeca.



Al encender esta Hoguera Sagrada, después de varias experiencias en que se encendía de forma inmediata, pude observar varias cosas, el minuto que tardo en prenderse me pareció eterno, mi vientre, corazón y mente le preguntaban al Abuelo Fuego el porque de la "tardanza", él responde: "Estoy viendo los corazones de todos los presentes". Mas se enciende vigoroso y para confirmar su beneplácito forma en el centro de la Hoguera, un cubo perfecto, replica del de piedra a la que he hecho referencia.



Danzamos, cantamos, presentamos ofrenda de flores, cerramos dando las gracias a las Direcciones del Universo, para finalmente abrazarnos y llorar de alegría, de gozo, de felicidad y contento, por sentir el amor, la fraternidad, las bendiciones del Padre Madre Dador de la Vida, en este concepto de los ciclos de la vida, en este espacio-tiempo al que la Cumbre Olmeca nos convoco, en torno al Retorno de Quetzalcoatl.



Durante todo el evento hubo actividades múltiples y algunas conferencias. Malinalticitl hace esta crónica de acuerdo a lo que a ella le ha tocado directamente vivenciar. Los hermanos del Nodo Maya, con su proyecto de crear vida, de llenar de vida al planeta, participaron activamente en cada región, entregando árboles a los niños, para ser sembrados, contribuyendo a fomentar la conciencia ecológica y el amor por la Madre Naturaleza.

Gracias a lo Divino que ha permitido este encuentro, a la manifestación elocuente y clara del Reino Elemental: Agua, Tierra, Aire y Fuego, a todos los Reinos de la Naturaleza, que dieron su beneplácito para que todo fluyese en armonía.

Gracias al Gran esfuerzo humano de nuestros anfitriones: Jesús Fabián Ortiz, su familia y solidarios amigos; a las Comadritas Sahumadoras del grupo Olmeca; al Nodo Maya de Coatzacoalcos. Así tambien a Pedro Hernández; al Capitán Bucio; a Don Antonio Velasco Piña, a Paty Ríos, al General de la Conformidad de la Virgen de Zapopan, a Ana Luisa Solís; a la Mesa de Danza del Señor del Veneno; Al Caminante de la Paz Oscar Tinajero que sorpresivamente se hizo presente, a nuestros distinguidos visitantes de América y Europa, a todos aquellos que participaron desde 13 países y 90 ciudades del planeta, dándonos Fuerza y llevando a cabo rituales similares.



Finalmente me han comentado que los carbones de la bracita sagrada de la Hoguera Divina, que fueron repartidos entre las sahumadoras y los presentes, llegaron a España. Con dichos carbones, en el mismo concepto de amor y de unión, encendieron otra Hoguera Sagrada, repartiendo a su vez estos carbones, que han llegado a Suiza.

El Fuego del Corazón de Quetzalcoatl, esta tocando el corazón de la humanidad.



TLAZOCAMATI

Las piezas del engranaje cósmico se han puesto en movimiento.

Honro y agradezco:

Con Amor Infinito: Lolita Vargas Malinalticitl